La solución estaba ahí, en un baño público de Oaxaca, México...
3 comentarios:
Anónimo
dijo...
Qué gran razón hay en tu fotografía. Y por eso te voy a contar una pendejada. Igual hasta te suena. Y es que había un pasmao con el ordenador hecho una traza. Un portátil HP, para más señas. El tipo debía ser un borracho, un drogata o simplemente muy tonto, porque mira que es difícil darle tantos golpes al ordenador y en todas las posiciones, arriba, abajo, del revés, abierto y cerrado. Al interfecto no se le ocurre otra cosa que llamar al servicio técnico, pensando que eran tan tontos como él, Y como no había contacto visual, pues el servicio técnico era telefónico, creyó buena idea engañarles y acusar falsamente al transportista para conseguir su ordenador inmaculado a 0 € de coste. Pero hete aquí que en el servicio técnico no son tontos, o al menos no lo son tanto, y descubren, entre otras cosas, que el ordenador portátil que es enviado cerrado, llega con golpes que indican que se han producido cuando el ordenador estaba abierto y que era imposible que sucedieran con el ordenador cerrado. En resumen, que hay varias pruebas técnicas y, podría decirse, científicas, que demuestran que los daños no eran de transporte, a parte de que algunos de los desperfectos no son recientes y hay golpes nuevos sobre golpes más antiguos. Al interfecto no se le ocurre otra cosa que una idea genial: -Tengo fotos que demuestran que el ordenador salió de mi casa sin daños - dijo al Sat. -Estupendo. Mándelas, por favor, y las analizamos - respondieron ellos. Y recibieron las fotos por e-mail. La fecha venía marcada en el nombre del archivo, y correspondía a finales de octubre. Bien, veamos. Es muy sencillo. Abrir exif reader, programa que te muestra la fecha exacta de creación del archivo fotográfico y, ding dong, fecha real, pongamos, abril. Entonces, surge una pregunta: por qué el tipo que aparece en la fotografía delante de un estor azul, supuestamente, le pone fecha de octubre a una foto que es de abril. ¿Hace falta imaginación? No, yo creo que no. Creo que es bastante claro todo lo que ocurre y que las pruebas así lo demuestran.
Esto es un esbozo, querido Eduardo, de una historia. ¿Crees que sería buena idea desarrollarla bien y que tendría éxito?
My dear Anónimo: no he acabado de entender tu historia (ni de acabar ni de empezar, apenas he entendido nada) pero me parece fascinante (tampoco se muy bien por qué), así que, sin dudarlo, la respuesta a tu pregunta es un inapelable SI, debes desarrollarla, será todo un éxito, derrocha pasión, amigo mío, que la vida son dos días!
3 comentarios:
Qué gran razón hay en tu fotografía. Y por eso te voy a contar una pendejada. Igual hasta te suena. Y es que había un pasmao con el ordenador hecho una traza. Un portátil HP, para más señas. El tipo debía ser un borracho, un drogata o simplemente muy tonto, porque mira que es difícil darle tantos golpes al ordenador y en todas las posiciones, arriba, abajo, del revés, abierto y cerrado. Al interfecto no se le ocurre otra cosa que llamar al servicio técnico, pensando que eran tan tontos como él, Y como no había contacto visual, pues el servicio técnico era telefónico, creyó buena idea engañarles y acusar falsamente al transportista para conseguir su ordenador inmaculado a 0 € de coste.
Pero hete aquí que en el servicio técnico no son tontos, o al menos no lo son tanto, y descubren, entre otras cosas, que el ordenador portátil que es enviado cerrado, llega con golpes que indican que se han producido cuando el ordenador estaba abierto y que era imposible que sucedieran con el ordenador cerrado. En resumen, que hay varias pruebas técnicas y, podría decirse, científicas, que demuestran que los daños no eran de transporte, a parte de que algunos de los desperfectos no son recientes y hay golpes nuevos sobre golpes más antiguos.
Al interfecto no se le ocurre otra cosa que una idea genial:
-Tengo fotos que demuestran que el ordenador salió de mi casa sin daños - dijo al Sat.
-Estupendo. Mándelas, por favor, y las analizamos - respondieron ellos.
Y recibieron las fotos por e-mail.
La fecha venía marcada en el nombre del archivo, y correspondía a finales de octubre.
Bien, veamos. Es muy sencillo. Abrir exif reader, programa que te muestra la fecha exacta de creación del archivo fotográfico y, ding dong, fecha real, pongamos, abril.
Entonces, surge una pregunta: por qué el tipo que aparece en la fotografía delante de un estor azul, supuestamente, le pone fecha de octubre a una foto que es de abril. ¿Hace falta imaginación? No, yo creo que no. Creo que es bastante claro todo lo que ocurre y que las pruebas así lo demuestran.
Esto es un esbozo, querido Eduardo, de una historia. ¿Crees que sería buena idea desarrollarla bien y que tendría éxito?
My dear Anónimo: no he acabado de entender tu historia (ni de acabar ni de empezar, apenas he entendido nada) pero me parece fascinante (tampoco se muy bien por qué), así que, sin dudarlo, la respuesta a tu pregunta es un inapelable SI, debes desarrollarla, será todo un éxito, derrocha pasión, amigo mío, que la vida son dos días!
La vida a veces consiste en un detalle.
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